6.4 : Evaluación heurística: cómo realizar una evaluación heurística

La evaluación heurística es un método en el que contrata a expertos en usabilidad para evaluar la usabilidad de su diseño. Estos expertos cotejan su diseño con una lista de principios de usabilidad o heurística. Veamos qué son las evaluaciones heurísticas, sus pros y contras, así como cómo realizar su propia evaluación heurística.
Cómo realizar su propia evaluación heurística
El conjunto de 10 heurísticas de usabilidad de Nielsen y Molich es un excelente punto de partida.
1. Visibilidad del estado del sistema
El sistema siempre debe mantener informados a los usuarios sobre lo que está sucediendo, mediante la retroalimentación adecuada dentro de un tiempo razonable.
2. Coincidencia entre el sistema y el mundo real
El sistema debe hablar el idioma de los usuarios, con palabras, frases y conceptos familiares para el usuario, en lugar de términos orientados al sistema. Siga las convenciones del mundo real, haciendo que la información aparezca en un orden lógico y natural.
3. Control y libertad del usuario
Los usuarios a menudo eligen las funciones del sistema por error y necesitarán una “salida de emergencia” claramente marcada para salir del estado no deseado sin tener que pasar por un diálogo extenso. Soporte deshacer y rehacer.
4. Coherencia y normas
Los usuarios no deberían tener que preguntarse si diferentes palabras, situaciones o acciones significan lo mismo. Siga las convenciones de la plataforma.
5. Prevención de errores
Incluso mejor que los buenos mensajes de error es un diseño cuidadoso que evita que ocurra un problema en primer lugar. Elimine las condiciones propensas a errores o verifíquelas y presente a los usuarios una opción de confirmación antes de que se comprometan con la acción.
6. Reconocimiento en lugar de recuerdo
Minimice la carga de memoria del usuario haciendo visibles los objetos, acciones y opciones. El usuario no debería tener que recordar información de una parte del diálogo a otra. Las instrucciones de uso del sistema deben estar visibles o fácilmente recuperables cuando sea apropiado.
7. Flexibilidad y eficiencia de uso
Los aceleradores, que el usuario novato no puede ver, a menudo pueden acelerar la interacción para el usuario experto, de modo que el sistema puede atender tanto a los usuarios sin experiencia como a los experimentados. Permitir a los usuarios personalizar las acciones frecuentes.
8. Diseño estético y minimalista
Los diálogos no deben contener información que sea irrelevante o que rara vez se necesite. Cada unidad adicional de información en un diálogo compite con las unidades de información relevantes y disminuye su visibilidad relativa.
9. Ayude a los usuarios a reconocer, diagnosticar y recuperarse de errores.
Los mensajes de error deben expresarse en un lenguaje sencillo (sin códigos), indicar con precisión el problema y sugerir una solución de manera constructiva.
10. Ayuda y documentación
Aunque es mejor si el sistema se puede utilizar sin documentación, puede ser necesario proporcionar ayuda y documentación. Cualquier información de este tipo debe ser fácil de buscar, centrada en la tarea del usuario, enumerar los pasos concretos a realizar y no ser demasiado grande.
Jakob Nielsen desarrolló originalmente la heurística para la evaluación heurística en colaboración con Rolf Molich en 1990 [Molich y Nielsen 1990; Nielsen y Molich 1990]. Desde entonces, Jakob ha refinado las heurísticas basándose en un análisis factorial de 249 problemas de usabilidad [Nielsen 1994a] para derivar un conjunto de heurísticas con el máximo poder explicativo, dando como resultado este conjunto revisado de heurísticas [Nielsen 1994b].
Estos están probados y son verdaderos y deberían ser su primera parada para una evaluación heurística o una revisión de expertos. La creación de su propia heurística es una tarea avanzada y no debe realizarse hasta que tenga muchos años de experiencia.
Seleccione sus evaluadores
Asegúrese de elegir cuidadosamente a sus evaluadores. Sus evaluadores no deberían ser sus usuarios finales. Por lo general, deben ser expertos en usabilidad y, preferiblemente, con experiencia en el dominio del tipo de industria de su producto. De esa manera, pueden brindarle recomendaciones relevantes y específicas de la industria para mejorar su diseño. Por ejemplo, si su diseño es un sistema de punto de venta para la industria de restaurantes, entonces su evaluador experto debe tener al menos un conocimiento general de las operaciones del restaurante.
Le recomendamos que contrate diferentes expertos como evaluadores y, preferiblemente, contrate evaluadores con diferentes áreas de especialización. Eso es porque Jakob Nielsen descubrió en una evaluación heurística en 1992 que diferentes evaluadores identificaron diferentes números y tipos de problemas de usabilidad. Por lo tanto, si contrata a varios evaluadores, puede garantizar la mayor tasa de detección posible de problemas de usabilidad.
Nielsen sugiere que entre tres y cinco evaluadores son suficientes. El consenso general es que más es mejor, especialmente cuando los evaluadores tienen diferentes conjuntos de habilidades (por lo que es más probable que el equipo detecte diferentes problemas de usabilidad). Sin embargo, sus limitaciones financieras y de tiempo a menudo determinarán el número de evaluadores en un proyecto. Dicho esto, dos o tres evaluadores suelen ser suficientes en las primeras etapas de desarrollo para identificar la mayoría de los problemas de usabilidad.
Informe a sus evaluadores
Informe a sus evaluadores para que sepan exactamente qué deben hacer y cubrir durante su evaluación. Debe estandarizar su sesión informativa para asegurarse de que los evaluadores reciban las mismas instrucciones; de lo contrario, puede introducir sesgos en su evaluación. En su informe, es posible que desee pedir a los evaluadores que se centren en una selección de tareas, pero a veces pueden indicar qué tareas cubrirán en función de su experiencia y conocimientos.
Realizar la primera evaluación
En la primera ronda, los evaluadores utilizarán el producto libremente para hacerse una idea de los métodos de interacción y el alcance de su producto. Esto les ayuda a identificar los elementos específicos que desean evaluar en la segunda ronda.
Realizar la segunda evaluación
En la segunda fase de evaluación, los evaluadores volverán a analizar el producto, pero esta vez aplicarán la heurística elegida a los elementos que han identificado durante la primera fase. Los evaluadores se centrarán en elementos individuales y observarán qué tan bien encajan en el diseño general.
Registre los problemas identificados
Los evaluadores deben registrar los problemas ellos mismos mientras llevan a cabo sus diversas tareas para rastrear cualquier problema que encuentren. Asegúrese de pedir a los evaluadores que sean lo más detallados y específicos posible cuando registren los problemas que encuentren.
Sesión informativa
En la sesión de debriefing, los diferentes evaluadores cotejan sus hallazgos y establecen una lista completa de problemas. A continuación, sugieren posibles soluciones para estos problemas basándose en la heurística.